Fue la menor de siete hermanos, cuatro mujeres y tres hombres, su madre, María del Carmen Arzac, es referida como una persona dominante, autoritaria, agresiva, cerrada en sus creencias, fanática religiosa con escasa capacidad de disentimiento y no ofrecía ninguna posibilidad de contacto con sus hijos.
El padre, Antonio Mijangos, era descrito como un hombre sensible, dedicado al trabajo, necio, indeciso y hasta de débil carácter.
Claudia estudio la carrera de comercio, sus papás murieron cuando era joven y le dejaron una cuantiosa herencia, para este entonces ella ya estaba casada con Alfredo Castaños.
1972, la pareja se mudo a Querétaro y tuvieron tres hijos, Claudia María, Ana Belén y Alfredo.
Alfredo (padre) era empleado bancario y Claudia mantenía una tienda de ropa exclusiva para mujeres, se les describe como una familia conservadora muy apegada a la religión católica, incluso, Claudia se convirtió en maestra de catecismo, ética y religión en el colegio "Fray Luis de León" ahí mismo en Querétaro donde también asistían sus hijos.
Con el paso del tiempo empezaron a hacerse notorios lo problemas existentes entre la familia relacionados por una parte al carácter extremadamente posesivo, dominante y abusivo de Alfredo que mantenía a Claudia supeditada a su voluntad.
Claudia empezaba a ver ángeles y demonios que le daban ordenes, le mostraban el futuro y le decían que dibujar.
Para tratar de solucionar el problema, fueron a terapias matrimoniales con padres católicos y psicólogos. Su terapeuta, Jaime Flores Gonzáles, describe a la pareja como una union que no era capaz de que ninguna de sus partes accediera a sus puntos de vista y por estas personalidades su matrimonio no tenia por donde crecer y les aconsejo que se divorciaran.
Ellos aceptarían el divorcio, Claudia se quedo con la custodia de los 3 hijos. Ella hostigaba de forma burda y violenta y le exigía al padre y al director de la escuela donde enseñaba, el padre Rigoberto, para que anulara el matrimonio religiosamente. El padre Rigoberto describe que en estas discusiones ella cambiaba completamente y dice "normalmente era una mujer cariñosa y físicamente era una mujer muy guapa, muy joven".
Durante todo ese tiempo, Claudia estaba forjando una relación con el padre Roberto, era un profesor y el encargado del catequesis en la misma escuela, el padre Rigoberto lo describe como "el padre Ramón era un tipazo, era un hombre 1.90, ojos azules uff, un tipazo, ¿no?".
Algunas personas cercanas a Claudia afirmaban que eran amantes, aunque otras lo niegan y se especula que esta relación fue la razón por la que decidió divorciarse. Cuando se destapo la relación de ellos dos, Ramón rápidamente cambio de estado y su apellido.
23 de abril de 1998, durante la tarde de ese día, Alfredo llevo a sus hijos a la kermes anual del colegio, en la noche los dejo con su ex-esposa con la que tuvo una fuerte discusión, le dijo que ya sabia del asunto del sacerdote y que a pesar de ello el quería regresar con ella, le insistió en que tomaran más terapia pero incluyendo a los niños; ella se negó, defendió sus sentimientos hacia el cura y Alfredo muy enojado dijo que se iba arrepentir y se fue. Después de esto, Claudia fue a costar a sus hijos, les dio la bendición y se fue a dormir.
3:00 am, Claudia se despertó, una voz en su cabeza comenzó a implantarle imágenes, le mostrabas visiones del futuro, le decía que Mazatlán había desaparecido y que todo Queretaro era un espíritu. Después de un tiempo de conversar con ella, Claudia se levanta y le habla a su amiga Verónica Vásquez, ella le dijo que seria mejor hablar del asunto mañana porque era muy tarde.
Después de colgar, la voz se empezó hacer mas clara, era una voz masculina, la voz le dio la indicación, tomar tres cuchillos de la cocina, uno para cada hijo.
Mijangos con total calma, primero se puso un vestido, bajo a la cocina, tomo los tres cuchillos y fue al cuarto del hijo menor, Alfredo el cual tenia 6 años, se apoyo sobre la cama, lo tomo de la mano izquierda y al nivel de la articulación de la muñeca comenzó a cercenarse la. El niño despertó pero no pudo hacer nada en contra de la fuerza de su madre, pero en cuestión de segundos la mano fue amputada por completo. Después lo apuñalo dos veces en el tórax al nivel del esternón, luego lo volteo y lo apuñalo dos veces a la altura del omóplato en la espalda.
Los llantos y gritos despertaron a la hermana mayor, Claudia Maria de 11 años, quien entro a la habitacion.
Los vecinos narran que escucharon claramente los gritos de "¡¿Que estas haciendo mamá?!, ¡¡No me mates por favor!!", pero nadie le hablo a la policía.
Mijangos cambio de cuchillo y apuñalo a la niña y repitió el orden y cantidad de acuchilladas, la niña logro huir pero con el pulmón perforado solo pude llegar al pie de la escalera donde se desmayo.
"La hiena" cambio otra ves de cuchillo y fue a la habitación de la hija del medio, Ana Belen de 9 años, ella se encontraba en shock sentada sobre su cama sin saber lo que estaba sucediendo, Mijangos se sentó junto a ella y cuando Ana le pregunto que estaba pasando ella le respondió "no te preocupes, voy a mandarte con tus hermanitos", volvió a repetir el orden y numero de apuñalamientos.
Después de terminar esto, bajo por las escaleras en busca de Claudia Maria, volvió a apuñalarla y la arrastro hacia la planta alta donde coloco su cuerpo en la recamara principal, después por sus otros hijos y los apilo uno encima de otro, los tapo con una cobija, se lavo las manos y los cuchillos, y se corto las venas antes de irse acostar con sus hijos.
A la mañana siguiente, Verónica Vásquez llego a la casa marcada con el numero 408, calle hacienda de regil, como había prometido ayer.
Cuando toco la puerta, fue recibida por Claudia cubierta de sangre y con una mirada extraviada, le dijo que pasara.
Verónica siguió a Claudia hasta la recamara donde vio la particular escena, ella pregunta que es lo que estaba pasando y Claudia le contesto "los niños se llenaron de captsu".
Verónica pensó que la familia había sido atacada por alguien y salio corriendo para avisar a las autoridades quienes al llegar a la casa describen la escena como "sangre, sangre y más sangre", los investigadores estiman que habían por lo menos más de 10L de sangre distribuidos por la casa.
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La policía asumió primero que se trataba de un intruso el que cometió el crimen, Mijangos fue trasladada a un hospital y se sospecho que el culpable era el ex-esposo.
tres días después, Mijangos estaba sedada y amarrada a la cama y se le cuestiono sobre lo que había pasado y lo primero que contesto fue "mis hijos esta dormidos en la casa", aparentemente no tenia memoria sobre lo sucedido incluso insistía en que tenia que irse del hospital porque tenia que hacerles el desayuno.
La sociedad de Queretaro al descubrir la verdad sobre el asesino, pedía la sentencia de Claudia, pero durante las investigaciones se apreciaron los problemas psicológicos que presentaba, después de un electroencefalograma descubrieron que padecía epilepsia en el lóbulo temporal, si uno tienen ataques en esta área del cerebro puedes perder la noción de la realidad, pero puedes seguir teniendo un comportamiento complejo.
Por este factor, Claudia recibió una sentencia de 30 años en un hospital psiquiátrico, una interna relata que Claudia se ponía muy inquieta cuando había luna llena, tanto así que la tenían que encerrar en una celda especial.
Claudia obtuvo su libertad en diciembre de 2019
Cuando fue liberada declaro lo siguiente:
"No me arrepiento de nada de lo que hice en el pasado y se que tu pregunta se refiere a la tragedia por la cual yo fui condenada hace 30 años, no me arrepiento por la sencilla razón de que yo no cometí ese crimen, en ese momento algo muy poderoso se apodero de mi cuerpo y fue quien realizo ese terrible asesinato, nadie sabe lo que sufrí y pague caro el haber sido victima de algo que se apodero de mi, tuve la mala suerte de ser elegida para vivir esta terrible experiencia".
Algo raro de todo este asunto es que se encuentra un curioso paralelo con lo asesinatos de Amityville, ya que en ambos casos las casas estaban llenas de parafernalia religiosas, ambos autores oían voces que les dijeron el orden de asesinatos y se despertaron a las 3:00am para cometer los crímenes. Otra cosa más extraña es que existen muchos casos similares que repiten estos mismos patrones y característica.
Pero lo más curioso de todo es que Queretaro es la capital de los exorcismos, tanto así que existe un ministerio del exorcismo y una capilla exclusiva para exorcismos. Los reportes sobre casos en un año llegan a superar los 4,000.
La casa de Mijangos sigue abandonada en la actualidad y muchas de las investigaciones echas ahí se han visto figuras blancas semi-transparentes, voces de niños o esferas de vapor.
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