La madrugada del 23 de Agosto del 2010 un vehículo que transportaba migrantes sudamericanos y centroamericanos por San Fernando, Tamaulipas para llevarlos a Estados Unidos, fue interceptado por hombres del cartel Los Zetas, estos increparon a los migrantes dándoles 2 opciones, o trabajaban para el cartel o serían asesinados, varios migrantes aceptaron trabajar para el cartel pero los que no fueron llevados a una bodega abandonada donde fueron ejecutados con disparos en la cabeza a sangre fría. A la mañana siguiente en un retén militar a 3Km de la masacre llegó un hombre moribundo que respondía al nombre de Luis Freddy Lalas Pomavilla, único superviviente de los ejecutados la noche anterior.
Las cifras son un misterio, aunque la versión oficial del ministerio reporta una media de 71-74 ejecutados y únicamente un rango de 1-3 sobrevivientes la versión de Luis Freddy menciona más víctimas.
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